Una muerte hermosa

La gente en la época medieval estaba muy preocupada por la muerte, lo cual es comprensible si consideras lo piadosa que era la sociedad en ese momento y también el hecho de que muchas personas eran víctimas de la Peste Negra. Como resultado, se puso de moda una tendencia conocida como "ars moriendi" o "El arte de morir".



La idea giraba en torno a morir una buena muerte cristiana, según el libro de Austra Reinis llamado "Reformar el arte de morir" (Ashgate, 2007). La muerte debe ser planificada y pacífica. Solo para agregar más estrés cuando esté a punto de reventar sus zuecos, la persona moribunda debe, como Cristo, aceptar su destino sin desesperación, incredulidad, impaciencia, orgullo o avaricia. Morir bien era particularmente popular entre el sacerdocio, lo que llevó a muchas de las infames pinturas medievales de monjes y hombres santos a aceptar sus brutales asesinatos con calma y serenidad.